Soluciona este problema de inmediato modificando la forma en la que te sientas, ¡Evita imitar posturas equivocadas que pueden afectar tu espalda.
Pero las cosas se ponen más graves cuando te sientas mal: La columna vertebral está diseñada para sostener el peso de la cabeza contra la gravedad, pero ciertas posiciones se entrometen en esta alineación. Si quieres evitar los problemas de cuello y espalda, dolores de cabeza, y dolores en los brazos y piernas, evita estos errores para defenderte de algunos de los efectos secundarios que causa sentarte mal:
1. Encorvarte.
Cuando permites que tus hombros rueden hacia delante, tu pelvis se inclina naturalmente hacia atrás para compensar y evitar desplomarse hacia delante. Esto crea una curva en forma de C en tu columna vertebral, por lo que debe manejar una fuerza que presiona directamente hacia abajo. Esta posición causa dolor y tensión.
Para relajarte, rueda tus hombros hacia atrás y logra que tu columna vertebral sea esté perfectamente recta.
2. Te sientas en una silla acolchonada o una almohada.
Cuando te sientas sobre una almohada, cama o sofá cómodo, tus pompas se hunden y tu pelvis se inclina hacia atrás, por lo que tu cuerpo tiene que trabajar más duro para mantener tu columna en posición vertical, y no puede realmente relajarse cómodamente. Mejor elige un lugar duro para sentarte (como una silla o un banco) y evítate todo esto.
3. Te inclinas hacia atrás.
A menos de que estés en un coche u avión, cuando resistes la fuerza de moverte hacia delante, no es necesario apoyar la espalda cuando te sientas, dice el doctor Cucuzzella. Si tiendes a inclinarte hacia atrás, probablemente es porque estás sentada en una superficie sin mucho apoyo.
4. Ves hacia tu cadera.
Cuando dejas que tu cabeza cuelgue hacia abajo, para leer tu teléfono o cualquier dispositivo, el peso de tu cabeza jala tu columna vertebral, lo que pone en tensión la parte superior de la espalda y causa dolores de cabeza por tensión. Una cabeza normal pesa entre 4 y 5 kilogramos, inclinarla hacia delante hace que se sienta igual de pesada que 27 kilogramos, de acuerdo con un estudio publicado en la revista Surgical Technology International. Si tienes que mirar hacia arriba o abajo, mueve los ojos en lugar del cuerpo.
5. Cruzar las piernas.
Esto inclina sutilmente una cadera hacia arriba, lo que en última instancia genera tensión en tu columna vertebral. Mantén tus rodillas en forma cuadrada frente a la cadera, para mantener todo en línea.
6. Tu asiente está demasiado abajo.
Esto hace que te hundas en dicho asiento. Los resultados: Tu pelvis se mete hacia atrás, tu columna se encorva, y tu cabeza se inclina hacia delante. Mantén tu cuerpo en un ángulo de 90 grados con respecto a tus muslos, para mantener alineada la columna.
7. Con tus pies colgando.
Si tu silla es demasiado alta, y tus piernas cuelgan sin fuerza, la gravedad los jala hacia el suelo. Esto inclina tu pelvis hacia atrás y causa un desbalance en tu cuerpo. Esto suele causar demasiado dolor.
Idealmente tus muslos deben estar paralelos al suelo. Por lo que recomendamos que bajes tu silla, para que puedas formar con tus piernas un ángulo de 90 grados con respecto al suelo.
8. Te sientas demasiado atrás en el asiento.
Tienes unas piernas muy largas, está bien. Lo que necesitas es sentarte hacia atrás hasta el punto en que tus rodillas se mantengan a la altura de la cadera. Pero, si tienes las piernas más cortas, sentarte hasta la parte posterior de la silla hará que tus pies cuelguen.
9. En el suelo, apoyas tus brazos hacia atrás.
Esto inclina tu pelvis hacia atrás de una manera que se mete con la cuerva natural de la columna vertebral. Mejor siéntate de rodillas sobre el suelo, y mantén tu columna totalmente recta. Con esta postura lograrás que tu cuerpo se extienda completamente, sin que ningún músculo quede acortado. Además no se altera ni la flexibilidad, ni la movilidad de los mismos.
10. Tu punto focal esta debajo o encima de tus ojos.
La mejor posición para ver el celular, o la televisión, o cualquier pantalla se encuentra justo al nivel del ojo. Mira hacia arriba, y lograrás que haya tensión en los músculos. Si miras hacia abajo, los músculos del cuello y la espalda tendrán que trabajar más duro para sostener la cabeza. Puedes probar ajustando la pantalla o tu silla a un nivel que puedas verla directamente.
11. Reposas ambos brazos en la silla.
Están diseñadas para apoyar tu cuerpo, pero con la postura ideal, debe ser capaz de sostenerse por sí mismo. Los brazos de la silla terminan reposicionando tu cuerpo de una manera anormal (como inclinando los hombros hacia delante). No utilices los brazos para apoyarte.
12. Te sientas en tu silla por un tiempo ridículamente exagerado.
Vivir sentada en una silla es lo peor que le puedes hacer a tu cuerpo, según el doctor Cucuzella. Intenta hacer actividades que incluyan estar parada (como ir al baño), para que tu cuerpo pueda descansar. O simplemente levántate y estírate al lado de tu escritorio. Aunque todos en la oficina te vean como una loca?