Laura Gallazi lleva cuatro años esperando justicia después de que una doctora decapitará a su bebé en el parto y nadie ha pagado por su negligencia. Esto sucedió en Escocia.
Pone presión a las autoridades
La pesadilla inició en el 2014 cuando Gallazi embarazada de 25 semanas rompió fuente y fue trasladada de emergencia al Hospital Ninewells de Dundee.
Según relató esta semana la mujer allí estuvo bajo observación por tres días hasta que vio que el cordón umbilical salía de su interior. Esto llevó a los médicos a provocar el nacimiento. Aunque, en un principio, le dijeron que sería un cesárea, a último momento, le ordenaron que pujara.
“Me habían dicho que sería una cesárea… no tengo trabajos de parto”. ¿Qué estaba ocurriendo? “¡Puja! ¡Puja!”, se repitió el mandato. “Algo no está bien”, relató la madre sobre aquél tenso momento.
“Sentí un estallido. ¿Qué había sido eso? Y no sentí nada entre mis piernas, así que pensé que lo había hecho. Lo hice. Mi hijo está aquí. No lo sentí llorar pero no estaba preocupada por eso porque sabía que era muy pequeño. Pero luego la habitación se volvió un caos”, continuó relatando.
Una médica, identificada como Vishnavy Laxman, provocó la “decapitación” de su bebé. Esa parte del cuerpo permaneció en el útero.
Pero, ni siquiera fue Laxman quien le informó a la paciente el trágico desenlace. “Se paró al pie de mi cama y me dijo que mi hijo había sido decapitado durante el parto. Y le dije: ‘Lo sé. lo sentí’”, contó la escocesa.
Aunque cuatro años después, a la mujer solo le queda el recuerdo de haber podido besar a su hijo, a quien llamaría Steven, y susurrarle toda la noche cuánto lo amaba, la doctora y su equipo fue exonerado.
A comienzos de este año, un tribunal médico dictaminó que la decisión de Laxman de intentar un parto vaginal a última hora fue equivocada y que eso fue lo que provocó la decapitación del bebé.
Los examinadores determinaron que Laxman había realizado un turno de 24 horas cuando la llamaron para asistir a la embarazada, por lo que supuestamente no estaba en condiciones de pensar correctamente. La licencia de la doctora no fue cancelada y esta continúa trabajando como médica.
Por su parte, la Oficina de la Corona decidió que nadie puede ser acusado penalmente por la muerte de Steven, porque la criatura no respiró en ningún momento, por lo que no era considerado una persona legal en Escocia.
“Eso es absolutamente horrendo. Me miraron a los ojos y me dijeron que mi hijo no existía. Tuve un certificado de defunción. Tuve un funeral. Tengo todas esas fotos. No es justo”, sostuvo la madre.
No se da por vencida
Gallazzi quiere hacer viral su caso para que se haga justicia, ya que no cree conveniente que la doctora Laxman siga teniendo licencia para laborar en un hospital.
¿Qué opina de este caso?