Una joven y su amigo hornearon las galletas y las compartieron con al menos nueve compañeros de su clase. Las mismas eran hechas con las cenizas de un cadáver. Esto sucedió en una escuela secundaria pública cerca de Sacramento, al norte de California.
Cenizas de su abuelo
Las autoridades de California, Estados Unidos, comentaron que las cenizas pertenecían al abuelo del joven que las cocinó.
Después de que los jóvenes repartieron las galletas confesaron la verdad a quienes las comieron.
Los investigadores entrevistaron a los nueve estudiantes, quienes tuvieron complicaciones estomacales después de enterarse de qué estaban hechas las galletas.
“Ella había mencionado anteriormente las cenizas de su abuelo”, indicó Andy Knox.
Knox dijo que la joven, quien no fue identificada por las autoridades, le había ofrecido previamente parte de las cenizas si cambiaba su lugar en el aula con otra alumna de la clase.
Andy Knox said he was one of the students who was given a cookie that contained ashes from a classmate’s grandfather
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— kcranews (@kcranews) 16 de octubre de 2018
“No le creí hasta que sacó la urna”, dijo Knox. “Me dijo que la galleta tenía un ingrediente especial”. Indicó que se preocupó después de probar la galleta. “Pensé que les había puesto drogas o algo así”, relató.
Knox dijo que la joven se rió y le dijo que la galleta contenía las cenizas de su abuelo.
“Yo quedé realmente aterrorizado”, afirmó. “Si cuando eras niño comiste arena en alguna ocasión, podías sentir algo crujiente entre los dientes”, dijo Knox. “Se sentía algo así”.
Por el momento se desconoce el castigo que la ley dará a los dos adolescentes y también a los padres.