Meterse a manejar en un circuito es siempre una experiencia inolvidable. Y hacerlo en un karting lo hace todavía más divertido.
Lejos del asfalto, este hombre llevó sus dotes de conducción a un escalón superior: un río congelado.
Lejos de quedarse en su casa por las condiciones climáticas, este muchacho agarró su karting y se animó a acelerar sobre el hielo, con una serie de aceleraciones y derrapes espectaculares.
Lo hizo con ayuda de neumáticos con clavos y de una caja de cambios manual.
Con información de TN Autos