La gobernadora de la provincia argentina de Tierra del Fuego, la peronista Rosana Bertone, reconoció que de niña fue víctima de abusos sexuales, algo que le “arruinó la vida”, ya que aunque logró tener “éxito político” aquella situación le generó “muchas carencias emocionales”.
“Sufrí abuso sexual intrafamiliar entre los 11 y los 12 años. Tardé mucho en hablarlo hasta con mi propia familia porque pensé que no me iban a creer. Sólo pude superarlo por la intervención de mi abuelo materno, a quién sí pude contarle porque me unía con él una relación muy especial”, indicó Bertone en una entrevista con la agencia estatal argentina de noticias Telam.
La semana pasada, la actriz Thelma Fardin reveló que fue violada hace una década, cuando era menor, por un compañero 20 años mayor, el también actor Juan Darthés, lo que desencadenó una oleada de denuncias públicas de otras mujeres -de ámbitos como el cine o la política- que aseguran fueron víctimas de abusos.
“Me parece bien que se sepa, que las mujeres cuenten su experiencia, más de allá de si decidieron o no realizar una denuncia judicial. Yo creo que la mayoría de los abusos ocurren en el seno de la propia familia, aunque también en el ámbito laboral”, dijo Bertone, que gobierna la provincia más austral de Argentina desde diciembre de 2015.
Si bien la mandataria, de 46 años, ya había hecho referencia a su propio caso de manera aislada, en 2015, hasta ahora no había dado detalles de la situación.
Según relató, la persona que abusó de ella era de su propia familia, alguien que todavía vive y en la familia Bertone “todo el mundo sabe quién es”.
Sin embargo, Bertone nunca presentó una denuncia, porque su abuelo no quiso.
“La justicia penal, por más que yo soy abogada y conozco el sistema penal, a mí no me resolvería nada. Como soy creyente creo más en la justicia divina. Pero eso en mi caso. Entiendo que se pida la detención de los abusadores, sobre todo de aquellos que reinciden una y otra vez”, enfatizó.
La gobernadora, que también fue diputada y senadora nacional, reconoció que puede tener “éxito político, pero también muchas carencias emocionales” por todo lo que los hechos que ahora reconoce le han dejado como secuela.
“Leo muchos reportajes de mujeres famosas abusadas y algunas dicen que llegaron a ser lo que son producto del aprendizaje y de la situación que les tocó vivir. La verdad que en mi caso no es así. A mí me arruinó la vida. La vida sexual, la formación de una pareja”, concluyó, aunque agregó que tuvo “contención psicológica” y se apoyó “mucho en la fe”. EFE