¿Qué es el metabolismo? De acuerdo a la Mayo Clinic, el metabolismo es el conjunto de todos los procesos químicos por los que el organismo convierte la comida en la energía que necesita. En ellos se incluyen la quema de grasas y la quema de calorías, tan importantes cuando queremos bajar de peso. Cuando las personas hablan de su metabolismo, en realidad se refieren a su ritmo metabólico: la cantidad de energía (o calorías) que gastan en reposo o haciendo ejercicio.
¿Por qué el metabolismo se vuelve lento con la edad?
Muchos son los factores que forman parte de tu metabolismo y determinan su velocidad. Además de los ya mencionados, la cantidad de músculo que tengas, tu altura y los niveles de diferentes hormonas incidirán también en ese ritmo. Hay algo que todos tenemos en común, y es que, tengamos el ritmo metabólico que tengamos, adelgazar se nos irá haciendo más difícil con el paso del tiempo. ¿Por qué esa condena?
Algunos procesos metabólicos se detienen
De acuerdo a Healthline, dos componentes celulares son los responsables de la quema de calorías en reposo: las mitocondrias y las bombas sodio-potasio. Las primeras crean energía para las células. Las segundas ayudan a producir impulsos nerviosos que causan las contracciones musculares, en las que están incluidos los latidos del corazón. La investigación que hay disponible al respecto demuestra que ambos procesos pierden su eficiencia con la edad, y por eso enlentecen tu metabolismo.
Cómo acelerar el metabolismo y contrarrestar el proceso
Por suerte, hay mucho que puedes hacer para acelerar tu metabolismo y evitar los estragos de la edad en tu cuerpo. Primero que nada, para aumentar la cantidad de calorías que quemas en reposo y haciendo ejercicio, debes aumentar la masa muscular. Para esto lo recomendable es hacer entrenamiento con pesas. Para que el músculo se reponga, déjalo descansar por 48 horas.
Llevar una alimentación adecuada también te ayudará a ganar músculo, especialmente si incluyes bastantes fuentes de proteína en tu dieta. Asimismo, puedes incluir grasas saludables, ya que tanto estas como la proteína necesitan más energía para digerirse en el organismo.
Bebe entre uno y dos litros de agua por día, duerme 8 horas o más cada noche y asegúrate de permitirte suficiente comida y no menos: mantener el metabolismo rápido lleva trabajo duro, pero al final del día es tan sencillo como vivir saludablemente y escuchar a tu cuerpo.