Muy probablemente tu mamá y las madres de tus amigas hicieron lo propio cuando apenas empezaban la veintena: se casaron, formaron una familia y, ojalá, aún están juntos. Entonces, ¿cómo es que casarte a corta edad parece un error, pero para ellas era lo ideal? ¿Realmente hay edad para el matrimonio?
Se trata de lo que tengas en la cabeza
Casarse joven no significa que tu vida está arruinada. Al contrario, significa que conociste a tu compañero de vida muy pronto y se prometieron amor hasta el infinito.
Expertos alegan que, más allá de la edad, lo que realmente importa son las bases de la pareja y cuáles son sus planes. ¿Tienen dinero para mantenerse? ¿Tienen los mismos valores? ¿Están sincronizados en un plan de vida? Si las respuestas son positivas, la edad no debería influir en que tu matrimonio se vuelva un desastre, pues estás al lado de alguien quien va en sincronía contigo.
Aspectos de tu vida que el matrimonio no cambiará
Un error muy frecuente es creer que un compromiso necesariamente cambia algunos aspectos de tu vida. ¿Quién dice que no puedes salir de fiesta si estás casada? Claro, ahora irás de antro junto a tu pareja y será él a quien llevarás a casa para juguetear en la cama.