Edimburgo, Reino Unido – La estancia privada en Escocia del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y su esposa Melania el pasado fin de semana en su hotel costero Turnberry costó al Gobierno estadounidense casi 52 mil 500 libras (casi 59 mil euros), reveló hoy el diario “The Scotsman”.
El registro de gastos del Gobierno estadounidense al que ha tenido acceso el periódico escocés muestra una serie de pagos por un valor total de 52 mil 477 libras (unos 58 mil 860 euros) realizados por el Departamento de Estado a la empresa SLC Turnberry Limited.
Esta empresa gestiona el complejo Trump Turnberry, un hotel de lujo con campo de golf y spa que el mandatario adquirió en 2014, y que fue el lugar elegido para que la pareja presidencial se alojase durante su visita privada a Escocia del viernes por la noche al domingo.
No hubo actos oficiales
Trump aprovechó su visita a tierras escocesas, donde no participó en ningún acto oficial, para, según anunció en Twitter, pasar “dos días de reuniones, llamadas y, con suerte, un poco de golf”.
Según imágenes publicadas por la prensa británica, Trump dedicó parte del sábado y del domingo a practicar su deporte favorito junto a su hijo Eric, rodeados de grandes medidas de seguridad debido a las protestas organizadas en la playa que rodea el complejo, en el sureste de Escocia.
El rotativo informó de que la documentación consultada no aporta un desglose de los gastos en Turnberry, donde el coste medio de una habitación es de 132 libras la noche (148 euros), pero puede aumentar hasta las 7 mil libras (7 mil 800 euros) si se elige la suite de dos habitaciones del faro, la más lujosa del establecimiento.
¿Trump abandonó sus negocios?
De acuerdo con la información de “The Scotsman”, dos fuentes del hotel afirmaron que Eric Trump se hospedó allí durante el fin de semana.
Tras su toma de posesión en enero de 2017, Trump prometió ceder el control de sus negocios a sus vástagos y renunció, al igual que su hija Ivanka, una de sus asesoras más cercanas en la Casa Blanca, al cargo de director de la compañía SLC Turnberry.
Sin embargo, según sostiene el diario, la empresa matriz Golf Recreation Scotland sigue siendo propiedad exclusiva de Trump, a través de una entidad conocida como Donald J.Trump Revocable Trust, con sede en Nueva York.
El plan presentado por Trump en enero del año pasado para desligarse de sus negocios privados ha sido criticado ante las dudas que ha generado sobre si sirve realmente para evitar conflictos de interés.
Con información de agencia EFE