El FC Barcelona se encuentra contra las cuerdas tras la nueva negativa del Juzgado de Primera Instancia número 47 de Barcelona a conceder la medida cautelar que permitiría la inscripción de Dani Olmo en LaLiga. Con menos de 24 horas por delante, el club azulgrana trabaja a contrarreloj para evitar que el fichaje estrella de este mercado quede fuera de competición.
La situación es crítica, ya que la licencia temporal del mediapunta y la del delantero Pau Víctor expiran a las 23:59 horas de este 31 de diciembre. Ambos jugadores fueron inscritos el pasado verano gracias a la lesión de larga duración de Andreas Christensen. Sin embargo, el defensor danés ya está recuperado y su ficha volverá a estar activa, lo que obliga al club catalán a liberar espacio salarial o generar ingresos adicionales para cumplir con el fair play financiero de LaLiga.
🚨⚠️ The second court today has rejected Barcelona’s appeal to register Dani Olmo and Pau Victor, reports @mundodeportivo. pic.twitter.com/ZhvrfB68QV
— Fabrizio Romano (@FabrizioRomano) December 30, 2024
La negativa judicial y el plan B del Barcelona
El Barcelona intentó replicar la estrategia utilizada con Gavi, acudiendo a los tribunales para solicitar una medida cautelar que le permitiera inscribir a Olmo de inmediato. No obstante, la primera petición fue rechazada, y este lunes el juzgado emitió una segunda negativa, dejando al club sin margen de maniobra judicial.
La demanda estaba vinculada a la impugnación de la Normativa para la Elaboración del Presupuesto (NEP) de LaLiga, específicamente al artículo 77, que regula los límites salariales y la inscripción de jugadores. Sin embargo, el juez ha fallado en contra del Barcelona, lo que obliga a la directiva a activar un plan alternativo.
Ante este escenario, Joan Laporta ha optado por una solución financiera de emergencia: la cesión de asientos VIP en el futuro Camp Nou por un periodo de 20 años. Esta operación, que se espera reporte al club unos 100 millones de euros, permitiría no solo la inscripción de Dani Olmo y Pau Víctor, sino también la posibilidad de reforzar el equipo en el mercado de invierno.
El acuerdo fue negociado directamente por Laporta durante las festividades navideñas en Dubái, donde el presidente del club se reunió con inversores de Oriente Medio. Ahora, el Barcelona está a la espera de que LaLiga valide esta operación y dé luz verde para que Olmo pueda continuar vistiendo la camiseta azulgrana.
El Barcelona es consciente de que las posibilidades de recibir una resolución favorable eran limitadas, lo que explicó la decisión de Laporta de anticiparse y cerrar acuerdos financieros que ofrezcan una salida viable. Sin embargo, la incertidumbre persiste y el club se juega su reputación y competitividad en las próximas horas.