Un turista se quedó dormido en una lancha ajena, y cuando los dueños de la misma lo descubrieron intentaron despertarlo sin éxito, por lo que recurrieron a lanzarle un poco de agua en la cara.
El visitante se despertó visiblemente molesto y, en lugar de bajar de la lancha e irse, lanzó un golpe a quien le había tirado el agua a la cara.
El turista salta de la embarcación con la intención de pelearse con los dos hombres que le habían despertado. I
Los empleados le avisan de que llamaron a la Policía de Ibiza, y el turista dice, por lo que se retira de inmediato.
https://youtu.be/jngnLZf2CFQ
