La Asamblea Constituyente del presidente Nicolás Maduro quedó bajo sospecha, luego de que la empresa que dio soporte tecnológico a la elección asegurara que el dato de participación fue manipulado ¿Qué se sabe y qué no se sabe de la iniciativa?
– Lo que se sabe –
La Constituyente tomó posesión la semana pasada, controlado por la oposición, que convocó a una marcha en Caracas para rechazar lo que considera un “fraude”.
La asambleísta electa Delcy Rodríguez dijo que ambas instituciones podrán funcionar en el mismo edificio, que cuenta con un hemiciclo, donde sesiona la cámara de diputados, y un salón elíptico, que será la sede para la Constituyente.
Según el Consejo Nacional Electoral (CNE), más de ocho millones de personas (41,5% del padrón) eligieron el 30 de julio a los 545 asambleístas que redactarán una nueva Constitución.
Sin embargo, SmartMatic, que proveyó el sistema automatizado para las votaciones, aseguró que la cifra de participación fue manipulada. Estima que la diferencia entre la cantidad anunciada y la que arroja el sistema es de al menos un millón de electores.
La presidenta del CNE, Tibisay Lucena, rechazó que esa denuncia tenga fundamento y la vinculó con un bloqueo de cuentas a proveedores del organismo por parte de Estados Unidos, que la sancionó recientemente.
La Constituyente regirá el país como un “suprapoder” por encima de todos los poderes constituidos.
El mandatario asegura que la asamblea, cuya convocatoria no sometió a referendo, traerá “la paz” frente a protestas que exigen su salida y dejan unos 125 muertos en cuatro meses.
La Constituyente no será reconocida por Estados Unidos, la Unión Europea, y una decena de países latinoamericanos. Washington sancionó económicamente a Maduro y lo tildó de “dictador”.
De los 545 asambleístas, 364 fueron elegidos por municipios y 181 por sectores sociales. La oposición, que se negó a participar, denuncia que la votación sectorial fue concebida para favorecer a Maduro.
Ante denuncias de que el sistema de elección fue un “fraude” para instalar una “dictadura”, el oficialismo sostiene que abre paso a “la democracia directa”.
La oposición teme que en el país se instaure un sistema de elección “corporativo” para perpetuar al chavismo.
Maduro aseguró que la nueva Carta Magna, que sustituirá a la que promulgó en 1999 el fallecido expresidente Hugo Chávez, se someterá a referendo.
“Eso ya es lo de menos”, señala la analista Colette Capriles, subrayando que de antemano la Constituyente tomará decisiones ejecutivas y legislativas para “poner orden”, como adelantó Maduro.
El oficialismo tendrá en la Constituyente a sus cuadros más fuertes, entre ellos el número dos del gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello; la excanciller Rodríguez; y la primera dama, Cilia Flores.
– Lo que no se sabe –
Por cuánto tiempo sesionará, pues lo decidirán los asambleístas.
Si disolverá el Parlamento o la Fiscalía, como han amenazado dirigentes oficialistas. Maduro ya pidió levantar la inmunidad a parlamentarios implicados supuestamente en la violencia de las protestas.
La fiscal general, Luisa Ortega, chavista que rompió con Maduro, desconoció la Constituyente y acusó al mandatario de tener una “ambición dictatorial”, dijo estar segura de que van por su “cabeza”.
Si habrá elecciones. Una de las rectoras del poder electoral, Socorro Hernández, dijo que los comicios de gobernadores -que debieron realizarse en 2016 pero fueron pospuestos para diciembre de 2017- dependerán de “las decisiones” de los asambleístas.
La oposición advierte que también quedan en el limbo las presidenciales de 2018.
La gestión de Maduro y la Constituyente son rechazadas por 80% de los ciudadanos, según la encuestadora Datanálisis.
Aunque Maduro pidió investigar los “crímenes de la derecha” a una “comisión de la verdad” que creará la Constituyente, se ignora si está célula tendrá facultades penales. “Tienes tu celda lista”, amenazó el mandatario al vicepresidente del Legislativo, Freddy Guevara.
Maduro sostiene que la Constituyente traerá estabilidad frente al colapso económico, pero se desconocen las medidas para lograrlo.