El presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, aseguró que la ley marcial seguirá vigente en Mindanao “hasta sacar al último terrorista”, mientras el Ejército trata de poner fin a la rebelión yihadista en esta región del sur del país.
“Cuando llegó el momento, declaré la Ley Marcial (…) todo el mundo preguntaba, ¿cuándo se acabará? No se acabará hasta que saque al último terrorista”, declaró el mandatario filipino anoche en un discurso en Manila.
Duterte impuso la ley marcial en Mindanao, región de unos 20 millones de habitantes, el pasado 23 de mayo, horas después de que insurgentes del Grupo Maute -organización afín al Estado Islámico (EI)- iniciaran una rebelión armada en la ciudad de Marawi, al oeste de la isla.
“La rebelión de Marawi era puramente obra del EI y por eso tuve que declarar la ley marcial. Dije que teníamos que terminar con esto o acabaríamos mal”, argumentó el presidente en su discurso.
Desde que comenzó la rebelión hace casi cinco meses, Marawi ha sido escenario de unos combates entre las Fuerzas Armadas e insurgentes que han dejado más de un millar de muertos: 867 rebeldes, 163 soldados y 47 civiles, según los últimos datos del Gobierno.
Fuente: EFE