1. Gases. Se trata de flatulencias vaginales, que en realidad no provienen del intestino y por lo tanto no tienen olor. Son producto de la acumulación de gases y obedece a la pérdida de la tonicidad muscular de la misma. El ruido se produce cuando existe más espacio entre el pene y las paredes vaginales.
2. Pérdida de la erección. Si bien al producirse con determinada frecuencia forma parte de las llamadas disfunciones sexuales, un hecho aislado puede tener causas muy puntuales que no siempre se comprenden, dando lugar a la respuesta de angustia, enojo y vergüenza.
3. Goteo de los senos. El uso de anticonceptivos orales puede tener algunos efectos secundarios, como el goteo de leche de los senos. Si bien se trata apenas de una cantidad mínima, puede llegar a ser incómodo; por ello es importante acudir con el especialista para cambiar el método.
4. Lesiones en el pene. Los movimientos bruscos o el uso de determinadas prendas puede originar desde rasguños leves, hasta fracturas del pene en relaciones donde la mujer asume una posición dominante.
5. Pérdida de orina y flatulencias. A veces, producto de la relajación de esfínteres durante el orgasmo, puede darse alguno de estos accidentes en el acto.