La última victoria del Manchester City, una victoria de récord pues fue la número quince seguida del equipo de Guardiola, tuvo un nombre propio: David Silva.
El jugador canario marcó dos goles, uno antológico al tocar de tacón un servicio del otro Silva del equipo, el portugués Bernardo. Su nombre estaba en boca de todos tras la exhibición y Guardiola fue el primero en sumarse a los encendidos elogios.
“Un ciego ve que es un animal, un líder”, señaló el de Santpedor, que se descubre ante los números de un Silva que en 16 partidos ha anotado cinco goles y regalado ocho asistencias, superando sus registros de la pasada temporada.
“Es muy competitivo”, añadió Guardiola sobre el canario y apuntó que no iba a permitir que sus jugadores se relajasen después de la imponente racha por la que atraviesan.