Una sexoservidora volvió a trabajar en un notorio distrito rojo apenas 30 minutos después del parto.
Esto fue revelado por una oficina de Apoyo Comunitario de la Policía.
La agente Jacqui Fairbanks, ha estado ayudando a las trabajadoras sexuales en Hull’s Hessle Road durante diez años y dice que actualmente hay alrededor de 40 de ellas trabajando en el área en varias ocasiones.
Muchos provienen de entornos donde han sido abusados física y sexualmente, mientras que no tienen hogar y duermen en sofás.
Los problemas de salud mental son comunes y existen problemas de tráfico y coacción por parte de proxenetas y novios, explicó la oficial.
Pero según su experiencia, la anécdota más fuerte fue el de una joven que tuvo que regresar al trabajo luego de dar a luz.