Roma – Los precios mundiales de los alimentos se incrementaron un 8.2 por ciento en 2017 respecto al año anterior y alcanzaron su nivel más alto desde 2014, según informó hoy la Organización de la ONU para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
El índice que mide la evolución de los precios de una canasta de alimentos básicos alcanzó los 173.8 puntos en 2017, lo que supone un 8.2 por ciento más que en 2016, precisó la organización.
Los lácteos son los más altos
Los productos que registraron las mayores subidas en sus índices de precios en el conjunto de 2017 respecto al año anterior fueron los lácteos, con un aumento del 31.5 por ciento; la carne, que registró un aumento del 9 por ciento respecto a su nivel de 2016; los cereales, con una subida del 3.2 por ciento y los aceites vegetales, que se incrementaron un 3 por ciento en comparación con el año precedente.
Los precios del azúcar, por su parte, fueron un 11.2 por ciento más bajos en 2017, en promedio, que en 2016, debido principalmente a una abundante cosecha en Brasil, el principal productor mundial, señala la FAO.
A pesar de esta subida a nivel anual, los precios mundiales de los alimentos cerraron diciembre de 2017 con un índice de 169.8 puntos, una bajada del 3.3 por ciento con respecto al mes anterior, alentados por los fuertes descensos en los aceites vegetales y los productos lácteos.
Los precios mundiales de los alimentos alcanzan su nivel más alto desde 2014, según FAO.
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— Emisoras Unidas (@EmisorasUnidas) January 11, 2018
Otros productos, con baja
En contraposición al registro anual de 2017, en diciembre concretamente, las principales bajadas de precios las protagonizaron los aceites vegetales, los productos lácteos y la carne
Los primeros bajaron un 5.6 por ciento respecto a noviembre, debido a una bajada en los precios del aceite de palma ocasionada por crecientes existencias en Malasia e Indonesia que lastró a su vez las cotizaciones del aceite de soja, explica el ente.
Los precios de los productos lácteos, por su parte, cayeron un 9.7 por ciento.
Lo hicieron en este caso, por la bajada de los precios de productos como la leche descremada, la leche entera en polvo, el queso y la mantequilla, de los que hubo abundante suministro de exportación y baja demanda, señala la FAO.
La carne también bajó
Los precios de la carne también descendieron ligeramente en diciembre en comparación con el mes anterior, debido a una abundante oferta de carne de bovino.
En la misma línea se comportó el índice de precios del azúcar, que también disminuyó 4.1 por ciento desde noviembre, producto de factores estacionales y las expectativas de un importante superávit en el próximo año.
Se mantuvieron estables en diciembre los cereales.
Lo hacen por tercer mes consecutivo y en un contexto en el que los precios internacionales del trigo se debilitaron, mientras que los del maíz y el arroz se reforzaron.
