Lorde, Pink, Charlie XCX y Katy Perry son algunas de las artistas que han respondido a la polémica desatada tras los Grammy, sobre la presencia de las mujeres en la industria de la música.
La mayoría de los gramófonos entregados el pasado domingo fueron a dar a manos de hombres. Bruno Mars fue el gran ganador al llevarse los de mejor canción por “That’s What I Like” y mejor álbum y mejor grabación por “24K Magic”.
Ed Sheeran triunfó en el género pop con el disco “÷(Divide)” y el tema “Shape Of You”, mientras que Kendrick Lamar, que lideraba las candidaturas, recibió el galardón a mejor álbum de rap por “DAMN.”.
La canadiense Alessia Cara, de su lado, fue nombrada mejor artista nueva, uno de los premios más codiciados.
En un contexto de reivindicación social a favor de la igualdad de género y en pleno auge del movimiento “Time’s Up” contra el abuso sexual, la prensa preguntó al presidente de la Academia de Grabación por el bajo número de mujeres ganadoras y nominadas a las categorías principales.
Su respuesta desencadenó un terremoto. El cambio “tiene que empezar por que las mujeres que tienen la creatividad en su corazón y en su alma, que quieren ser artistas, que quieren ser ingenieras, que quieren ser productoras, que quieren forman parte de la industria a nivel ejecutivo, den un paso adelante”, declaró Neil Portnow.
Las últimas ganadoras a álbum del año fueron Adele y Taylor Swift.
“Creo que serían bienvenidas. No tengo experiencia personal con el tipo de muro de ladrillos al que os enfrentáis”, apuntó. “Somos nosotros como industria los que creamos oportunidades para todos lo que quieren ser creativos y creamos a la próxima generación de artistas que sienten que pueden hacer cualquier cosa”.
La artista neozelandesa Lorde, un prodigio del pop y única nominada a álbum del año, publicó una carta escrita a mano en el diario The New Zealand Herald, en la que agradeció a sus seguidores su apoyo a “Melodrama”, su último éxito.
“Gracias, también, por creer en las mujeres músicas. ¡Habéis establecido un bonito precedente!”, aseguró.
A pesar de optar a uno de los premios grandes, la Academia de Grabación no permitió que Lorde cantara durante la gala por falta de tiempo.
La actuación más memorable de la última edición de los Grammy corrió sin embargo a cargo de Kesha, que interpretó con fuerza “Praying”, en la que habla de que fue violada y acosada psicológicamente por su productor, lo cual él niega. La estadounidense Pink también criticó las palabras de Neil Portnow al asegurar que “las mujeres en la música no necesitan ‘dar un paso adelante’. Las mujeres han dado pasos adelante desde el principio”.
— P!nk (@Pink) 29 de enero de 2018
Katy Perry se sumó a las críticas afirmando que “todos tenemos la responsabilidad de terminar con esta absurda falta de igualdad por todas partes”.
“Estoy orgullosa de TODAS las mujeres que hacen un arte increíble a pesar de las continuas resistencias”, manifestó en las redes sociales.
?????? Another powerful woman, leading by example. We ALL have a responsibility to call out the absurd lack of equality everywhere we see it. I’m proud of ALL the women making incredible art in the face of continual resistance. ✊?
P.s VH1 Divas Live. https://t.co/RDmB7zRfId— KATY PERRY (@katyperry) 30 de enero de 2018