“Yo solo estaba orando para que Dios nos hiciera invisibles y no nos fuera a pasar nada a mis compañeros y a mí”, comenta la hija de Charlie Zaa.
Conmovedor relato
Lauren Mia Sánchez narró los momentos de terror que vivió mientras junto a otros estudiantes y un maestro intentaban sobrevivir al ataque en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland, Florida.
En una entrevista, la joven de 16 años dijo que estaba en las escaleras cuando el pistolero irrumpió en el plantel.
“Todo el mundo empezó a empujarme y yo no sabía que hacer, entonces, me regresé al salón”, relató.
En ese lugar se encontraba el profesor de Geografia, Scott Beigel, quien mantuvo abierta la puerta para cobijar a más estudiantes. Los alumnos se escondieron entre el escritorio y un armario.
La joven envió varios mensajes a su madre: “Están gritando horrible” y “tengo miedo” fueron dos de los mensajes. Su madre le decía que orara.
A casi una semana de la tragedia, Sánchez no puede contener las lágrimas, sobre todo cuando recuerda la acción de su profesor Beigel, quien no sobrevivió a la furia de Nikolas Cruz, acusado por el tiroteo reportado el miércoles de la semana pasada.
“Era el mejor maestro que yo tenía… trabajaba todos los días con muchísimo amor y puedo decir que aprendí mucho con él”, describió la muchacha. “Creo que todos sabemos que fue un héroe, porque no todos harían lo que el hizo. El se sacrificó por nosotros”, puntualizó.
“Es increíble que sea más fácil conseguir un arma que una botella de licor y un arma solo sirve para dañar al otro. A mí no me parece que deba ser legal para niños comprar ese tipo de artefacto”, agregó.
