Mark Zuckerberg pasó la tarde del martes siendo asediado por senadores desde la comodidad de un sillón de cuero negro cubierto con un cojín negro de unos centímetros de grosor extra.
El impulso del cojín bajo fue casi invisible, gracias al camuflaje del color.
Se sentó en un sillón de madera oscura y cuero negro con detalles de cabeza de clavo de latón, coronado con su propio cojín firme de centímetros de espesor que se ajustaba a la forma de la silla.
El multimillonario testificó ante el Comité Senatorial de Comercio, Ciencia y Transporte y la audiencia conjunta del Comité Judicial del Senado sobre ‘Facebook, la privacidad de las redes sociales y el uso y abuso de datos’ en Capitol Hill.
Zuckerberg se encuentra en un interrogatorio televisado de alto riesgo de los legisladores el martes y el miércoles sobre el uso de datos de Facebook para apuntar a los votantes estadounidenses en las elecciones de 2016.
Mark intentó tranquilizar a los legisladores, diciendo que Facebook investigaría ‘cada aplicación que tenía acceso a una gran cantidad de información’ en el sitio.