El rizador puede causarle muchos daños a tu cabello, causa más daño que la plancha, pero hay varias formas de rizar tu cabello sin dañarlo tanto. ¡Mira esta nota y anota!
Plancha
Lo que debes saber: Aunque la plancha suela asociarse con el pelo liso, lo cierto es que puedes crear rizos y ondas girando sutilmente la plancha.
Ideal para: Todas las texturas de pelo. Solo debes asegurarte de mantener la temperatura en menos de 300 grados y te advertimos, si tu pelo es fino, seco, quebradizo o tinturado, correrá el riesgo de sufrir daños mayores en el proceso.
Tip: Usa un protector de calor para reducir el daño.
Horquillas, ganchos y pins
Lo que debes saber: Las horquillas para el cabello, incluyendo las pinzas y los bobby pins, no solo sirven para esconder los mechones que te caen sobre la cara. También son útiles para dar textura al pelo, y de una forma muy fácil: solo envuelve tu pelo por secciones y asegúralas con tu horquilla de preferencia.
Ideal para: ¡Todas! Puedes fijar fácilmente el pelo húmedo y obtendrás un look rizado sin calor (y sin daños), o calentar el cabello antes o después para obtener más fuerza.
Rulos
Lo que debes saber: Los rulos vienen en muchos tamaños, formas y materiales, desde plástico hasta espuma (que permiten el secado natural).
Ideales para: Lo mejor de los rulos es que existe uno para cada tipo de textura de pelo y necesidad.
Tip: Usa un mousse, gel, spray voluminizador y crema para peinar, dependiendo de la textura de tu cabello, para garantizar una fijación más duradera.
Al natural
Lo que debes saber: Esta puede ser tal vez la técnica más fácil de todas, pues solo implica secar el pelo sin peinarse. De esta manera, si tienes un patrón natural de ondas, lo podrás conservar sin ser alisado por el cepillo.
Ideal para: A quienes mejor les funciona es a las que tienen el pelo naturalmente ondulado o rizado, y por consiguiente, a quienes tal vez menos efecto les haga será a las de pelo liso natural.
Tip: Independientemente de la textura natural de tu pelo, ¡te puede funcionar! Más aún si te aplicas un mousse, spray, gel o un suero para rizos desde la raíz hasta las puntas.