Una remota isla brasileña dio la bienvenida a su primer bebé en 12 años, luego de que una mujer rompiera las normas que prohíben dar a luz ahí.
Fernando de Noronha, un pequeño archipiélago en el Océano Atlántico, no autoriza los partos porque sus centros de salud no cuentan con maternidad, según O Globo. Las mujeres embarazadas deben viajar a tierra firme, donde la ciudad más cercana es Natal, 365 kilómetros a través del océano.
“La madre, que no quiere ser identificada, tuvo labores de parto en su casa”, dijo el administrador de la isla en un comunicado difundido por el diario O Globo. “La familia dice que no estaba al tanto del embarazo”.
“La noche del viernes tuve dolores y cuando fui al baño vi algo saliendo entre mis piernas. Ahí fue cuando el padre del bebé vino y lo recogió. Era un bebé, una niña”, dijo la mujer.