Si eres una persona ordenada y que sigue una rutina especial, y en esta misma incluyes tender la cama cuando te levantas, podrías estar albergando enfermedades.
Hay muchas investigaciones que indican que al “hacer la cama” se alberga alrededor de ¡Millón y medio de ácaros! sí lo leíste bien ¡Millón y medio!
Seguro te preguntarás ¿Cómo es posible que al ser ordenado/a y tender la cama estés favoreciendo a la suciedad? Simple: los ácaros se desarrollan en ambientes cálidos y húmedos… ¡¡Así como amanece tu cama cuando te levantas!!
Cuando una persona deja de “hacer” la cama, esta misma se vuelve cálida y seca, lo cual no es un ambiente apetecible para vivir para los ácaros.
Recordemos que los ácaros producen y desencadenan una serie de alergias, enfermedades respiratorias, entre otros males, y cuando llegamos a la cama a descansar, llegamos a dormir y respirar todos los ácaros de todos los días que se han quedado viviendo bajo las sábanas.
De igual manera es recomendable lavar las sábanas constantemente, cambiar las almohadas, no entrar a la cama muy sucio por trabajo o lo que sea, ya que todo lo que llevamos a las sábanas puede que se quede a habitar ahí… junto a nosotros. Te puedes ayudar abriendo ventanas, cortinas, que entre la luz y el viento a tu habitación. Así también te sentirás con más frescura, tanto tú, como tus sábanas y los ácaros no podrán vivir más junto a tí.