El padre del laureado cineasta mexicano, Guillermo del Toro, murió este miércoles en la ciudad de Guadalajara a los 86 años de una enfermedad renal, confirmó el gobierno regional.
Federico del Toro fue un hombre de negocios que se ganó la lotería y montó un imperio de concesionarios de autos que le dieron una feliz y acomodada vida al cineasta, quien de niño pidió de navidad una planta mandrágora para hacer magia negra.
Pero esa idílica vida se vio coartada de forma trágica. Federico del Toro sufrió un secuestro en 1998 que se resolvió sin violencia, pero aun así Guillermo decidió no vivir más en México. Desde hace años reside en Los Ángeles, Estados Unidos.
El director de “El laberinto del fauno” ha dicho en varias ocasiones que el apoyo de su padre fue determinante para convertirse en el director de cine de talla internacional que es hoy a los 53 años.
“Lamento profundamente el fallecimiento del señor Federico del Toro”, escribió en Twitter el gobernador de Jalisco, donde se encuentra la ciudad de Guadalajara, Aristóteles Sandoval.
Guillermo del Toro ganó el León de Oro el año pasado con la película “La forma del agua”, que además fue premiada con cuatro premios Oscar en Hollywood.