¿Cómo detectar una mentira? Estos gestos que detalan a los mentirosos, según la Psicología. El lenguaje corporal nos ayudará a descubrirlos.
Mueve rápidamente la cabeza
Si al hacerle una pregunta directa ves que la otra persona mueve rápidamente su cabeza, podría estar mintiendo en su respuesta. Podría echarla hacia atrás, inclinarla al frente o hacia un lado, a menudo justo antes de responder.
Se mantiene muy quieto
Es de dominio común que cuando una persona está nerviosa se pone inquieta. Pero, ¿qué pasa con las personas que permanecen inmóviles? Tener una postura rígida puede ser una señal de que alguien está nervioso y se prepara para un posible enfrentamiento. Cuando sostienes una conversación normal, es natural que muevas tu cuerpo de una manera sutil y relajada, con movimientos inconscientes. Así que, si percibes una postura rígida, desprovista de movimiento, algo podría estar mal.
Su respiración cambia
Cuando alguien te está mintiendo, podría comenzar a respirar con mayor pesadez. Es un acto reflejo. Cuando la respiración cambia los hombros se levantan y la voz podría adoptar un tono más bajo. En esencia, la respiración se modifica porque aumentan el ritmo cardiaco y la circulación sanguínea. El cuerpo experimenta estos cambios cuando se siente tenso y nervioso… cuando sabe, por ejemplo, que puede ser descubierto.
Repite palabras o frases
Esto sucede porque te está tratando de convencer, a ti y a ella misma, de algo que está diciendo. Busca validar la mentira en su mente. Por ejemplo, podría repetir “yo no…” una y otra vez. Asimismo, la repetición es una manera de ganar tiempo en lo que intentar recopilar sus pensamientos.
Se toca o cubre la boca
Una señal delatora es ponerse las manos sobre la boca. Esto sucede de forma automática, cuando una persona no quiere enfrentar un problema o responder una pregunta. Cuando alguien coloca sus manos sobre sus labios, significa que no quiere revelarlo todo, o que simplemente no quiere decir la verdad. Está, literalmente, obstaculizando la comunicación.
Cubre partes vulnerables de su cuerpo
Cuando están mintiendo, las personas suelen cubrir instintivamente partes vulnerables de su cuerpo. Esto puede incluir áreas como el cuello, pecho, cabeza o abdomen. De acuerdo con la experta, quien ha trabajado en investigaciones para el FBI, ésta es una actitud común en los tribunales. “Siempre puedo saber cuándo el testimonio de alguien ha dado en el clavo porque el acusado cubre su garganta con la mano”, explica.
Mueve los pies
Ésta es una de las primeras señales delatoras de una mentira. El mentiroso potencial se siente incómodo y nervioso, por lo que mueve las piernas sin siquiera darse cuenta. Esto muestra también que desea salirse de la situación, alejarse de ella. Los pies pueden decir mucho de alguien: fíjate en ellos cuando estés en medio de una negociación importante.
Da demasiada información
Cuando alguien habla y habla y proporciona demasiada información –con detalles que no son requeridos– existe una posibilidad alta de que no esté diciendo la verdad. Con frecuencia, los mentirosos hablan mucho porque esperan que, al mostrarse abiertos a conversar, otros crean en ellos.
Se le dificulta hablar
Si alguna vez ves un interrogatorio en video de un sospechoso que sí es culpable, te darás cuenta de que se le dificulta hablar cada vez más. Esto se debe a que, en momentos de estrés, el sistema nervioso disminuye el flujo de saliva, lo que seca las membranas mucosas de la boca. Otros signos a tener en cuenta incluyen morder el labio de forma repentina o fruncir los labios.
Mira fijamente, sin pestañear
Cuando alguien miente es común que rompa el contacto visual. Sin embargo, el mentiroso podría hacer un esfuerzo adicional por mantener el contacto visual en un intento de controlar la conversación y manipular a su interlocutor.
La mayoría de los estafadores lanza miradas demasiado largas, y con frecuencia pestañean poco. Por otro lado, cuando alguien dice la verdad, mueve sus ojos de vez en vez, e incluso mira hacia otros lados.