Dos hermanos fueron descubiertos por bomberos envueltos uno los brazos del otro en los restos calcinados de su casa después de un incontrolable incendio.
Zulkarnain Ajizul, de cinco años, y su hermano de dos años, Zulfadlil, murieron después de haber quedado atrapados e incapaces de escapar de las llamas que envolvieron su hogar.
Su vivienda fue arrasada por el fuego en la aldea de Kampung Hilir, cerca de Lingga, en el sur de Malasia.
Su hermana de ocho años, que no ha sido identificada, escapó de la residencia que se derrumba con quemaduras graves, pero se dice que tiene suerte de estar viva y se encuentra estable.
Los vecinos escucharon a los niños gritar y trataron desesperadamente de entrar a la fuerza en el inmueble en llamas para sacarlos, pero los intentos fueron inútiles.