La película “La Monja”, que forma parte de la saga Expediente Warren, ha conseguido hacer gritar de terror a millones de espectadores durante su fin de semana de estreno, liderando la taquilla y recaudando más de 53 millones de dólares.
Pero a parte de la escalofriante monja con los ojos inyectados de sangre y pálido tono de piel que se esconde en la obscuridad, existe una historia aún más aterradora sobre el demonio que inspiró la exitosa cinta.
Valak, un demonio del cual se tiene registro desde la Edad Media no es en realidad una monja y tampoco tiene cuerpo de mujer, en la mitología está representado como un niño montado sobre un dragón de dos cabezas. Uno de los libros de demonología católica más populares publicado en la época renacentista, “La Clave de Salomón”, retrata al terrible Valak, también conocido como Volac, Valu o Ualac, como un espíritu imponente, encarnado en la silueta de un niño con alas de ángel.
El demonio con forma de niño tiene a su cargo a 38 legiones de demonios y su oficio es “dar respuestas verdaderas sobre tesoros escondidos”, de acuerdo con “El Diccionario Infernal”, editado en 1863.
Según información de El Universal, el Rey Salomón mantuvo largas charlas con el temido Valak y varias decenas de otros seres demoniacos.
“La Monja”, protagonizada porDemián Bichir y Taissa Farmiga, está basada en investigaciones reales de los famosos cazafantasmas Ed y Lorraine Warren, ambientada en 1952 y desarrollada en un lúgubre monasterio de Transilvania.