El mejor aeropuerto del mundo, Changi de Singapur, elegido por Skytrax en los últimos seis años, continúa en el camino por la automatización extensiva.
Sus implementaciones del aeropuerto está la capacidad de que el avión se una a una línea de aterrizaje donde es detectado, identificado y monitoreado por una serie de cámaras y tecnología.
Una vez en la puerta de embarque, un aerobridge guiado por láser se posiciona para permitir el desembarco de los pasajeros, mientras que los vehículos automatizados descargan el equipaje; además, también hay robots que entregan comida y procesan la carga.
Los pasajeros se dirigen a los molinetes de inmigración para escanear e imprimir con su pulgar y se dirigen por su equipaje.
Changi abrió su Terminal 4 en octubre de 2017 con la intención de utilizarla como parteaguas para probar y desarrollar la automatización para la Terminal 5, un edificio mucho más grande que podrá atender a 50 millones de pasajeros al año.
La compañía SATS está probando un vehículos a control remoto que puede recoger el equipaje de un avión y trasladarlo al área de manejo en solo 10 minutos.
Por su parte, la autoridad civil de aviación (CAAS, por sus siglas en inglés) está probando una torre que permite a los controladores de tráfico aéreo monitorear aviones a través de cámaras digitales de infrarrojos que ayudan a la visibilidad cuando está borrosa o en la oscuridad.