Agotamiento psicológico
¿Qué lo causa?
El agotamiento psicológico ocurre cuando una persona alcanza su límite emocional. Se trata de un estado de fatiga mental extrema.
El cuadro puede desencadenarse a raíz de situaciones puntuales en las que te sientes sobrecargado, como tener demasiadas tareas en el trabajo. «En general, tiene que ver con el estilo de vida de la persona, el número de tareas que realiza, la visión que tiene sobre sí misma (algunas creencias sobre uno mismo pueden amenazar el autoestima) o si se siente capaz o no de lidiar con determinada situación.
Señales de alerta del agotamiento psicológico
Según el psicólogo, las manifestaciones de la fatiga pueden ser tanto conductuales como físicas.
Insomnio
En situaciones de estrés desencadenado por el agotamiento mental, son comunes las alteraciones del sueño y los cuadros de insomnio. «Es probable que esto ocurra por el exceso de actividad mental de la persona, que tiene más preocupaciones de las necesarias en la cabeza. En lugar de tener la mente en blanco a la hora de dormir, está con la cabeza llena de pensamientos», explica el especialista.
Variaciones de peso
De acuerdo con Friary, la relación de una persona con la comida puede ser una gran señal para identificar el agotamiento mental. Es común que las personas que están en situaciones de estrés usen la comida como válvula e escape.
En el otro extremo, la falta de apetito también es una manifestación de la fatiga. «Muchos aprendieron a asociar la comida con el alivio de angustias. Por otro lado, existen personas que en situaciones de estrés sienten menos hambre».
Fumar y beber en exceso
Así como la comida se vuelve una válvula de escape, el consumo de bebidas alcohólicas y tabaco también cumple esa función en algunos casos de agotamiento psicológico.
Irritabilidad
Los cambios de humor, con gran propensión a la irritabilidad, también son bastante comunes en cuadros de agotamiento mental. «En esa situación, los pensamientos tienden a ser más negativos, y lo que pensamos es lo que sentimos en el presente. Por eso, la persona puede estar de mal humor», explica el psicólogo.