Miles de migrantes hondureños que conforman la caravana que busca cruzar México hasta llegar a Estados Unidos se alistan hoy para una nueva travesía por el suroriental estado de Chiapas, desafiando el cansancio acumulado tras 10 jornadas.
Tras una agotadora marcha que los llevó este domingo de la frontera entre Guatemala y México hasta la ciudad de Tapachula, un recorrido de cerca de 40 kilómetros, buena parte del contingente pernoctó en la plaza central del municipio, inundada de mantas y mochilas.
Sobre las 06.30 hora local (13.30 GMT) muchos de los migrantes empezaron a despertarse junto con la salida del sol. Todavía cansados, pero con el propósito claro de llegar a Estados Unidos.
“Hay que enfrentar (el trayecto) con fuerza y seguir luchando adelante. Nada nos puede detener, solo la mano de Dios. Vamos confiados realmente porque la fe es lo más importante hasta seguir con nuestro objetivo”, dijo a Efe Cynthia Carolina.
Con 22 años, la joven viaja junto con su hijo de cinco años, Daniel de Jesús, con una mochila y unos simple “zapos” (sandalias).
Forma parte de esta caravana conformada por al menos unas 2.000 persona -aunque las cifras varían-, que busca llegar a la frontera de México con Estados Unidos, en un largo recorrido de más de 2.000 kilómetros.
“Dios da la fuerza y uno tiene que poner la voluntad para seguir adelante, y si seguimos, le damos”, cuenta a Efe José Jeovanny Mateo, un ilusionado joven de 20 años procedente del departamento de Ocotepeque, Honduras.
Este lunes el contingente viajará de Tapachula a Huixtla, alrededor de 35 kilómetros. La gran mayoría lo hace a pie, si bien algunos, si disponen de dinero, se mueven en transporte público cuando las fuerzas flaquean.
Es el caso de Isis Ramírez, de 32 años, que hoy tiene los pies destrozados y los lleva vendados. “En la caminata, los zapatos, como son de plantilla de hule, con lo caliente… y me duele un poquito, pero ya estoy mejor”, remarcó a Efe.
Los migrantes que continúan la caravana este lunes cruzaron en su mayoría ilegalmente el río Suchiate. Aunque casi todos lo hicieron el pasado fin de semana, esta noche todavía hubo quienes se atrevieron, por su cuenta, a cruzar este punto fronterizo para sumarse a la marcha.
A su vez, el Instituto Nacional de Inmigración (INM) atendió un total de 1.028 solicitudes de refugio de migrantes que ingresaron a territorio nacional por el punto fronterizo de Ciudad Hidalgo.
No obstante, estas personas han sido llevadas a una estación migratoria a la espera de que se resuelva su condición migratoria.
La caravana salió el 13 de octubre de San Pedro Sula (Honduras) con al menos unas 5.000 personas.
De acuerdo con el Gobierno guatemalteco, más de 2.000 fueron retornados desde Guatemala a Honduras, mientras que varios centenares permanecen en el puente fronterizo entre México y Guatemala, esperando su posible repatriación o la aceptación de su solicitud de refugio.
Con información de agencia EFE.