Vivimos en una época donde es fácil sentirse indignado y ofendido por todo, desde la dieta carnívora, hasta las series de televisión de los noventa, sin embargo ahora un millennial ha ido más lejos y se ha ofendido porque sus padres lo tuvieron sin su consentimiento y los ha demandado.
Raphael Samuel tiene 27 años y vive en India y acaba de demandar a sus progenitores por haberlo traído a este mundo a sufrir sin consultárselo antes.
Raphael pertenece a la clase de pensamiento llamado “antinatalista”, quienes consideran que tener hijos es un acto contra moral y antiecológico, por ende las personas deberían de abstenerse de la paternidad.
Aunque este chico menciona que adora a sus padres y tiene una buena relación con ellos, los está demandando para que entiendan lo que hicieron mal con él desde el principio, pues considera que sus padres son unos hipócritas y egoístas por haberlo sometido a las penurias de la vida.
Para un padre bueno su hijo está arriba de todos sus deseos y necesidades, pero el hijo mismo es un deseo del padre.
La procreación, según este movimiento es un acto comparable a la esclavitud y al secuestro, puesto que en ningún motivo, los niños son consultados si quieren o no nacer y enfrentarse a la vida.
Los niños de la India no le deben nada a sus padres, es decir, yo amo a los míos, tenemos muy buena relación, pero me tuvieron para su propia alegría y placer. Mi vida es increíble, pero no veo porqué deberíamos de someter a otra vida al caos de la escuela y a la angustia de buscar trabajo, especialmente cuando existía la opción de no existir en absoluto.
Mientras tanto, quienes están en su movimiento lo apoyan porque consideran que tener hijos es una gran carga para el planeta, y que no tiene motivo tenerlos si ello acelera el proceso de degradación social y ambiental.
No tenemos la intención de imponer nuestras creencias, pero se necesita más gente que considere que tener un hijo ahora mismo no está bien. Somo un grupo de personas que han decidido no reproducirse. ¡Indios libres de niños!