Todos tenemos algunos malos hábitos que no nos dejan vivir de una manera saludable. Y claro, algunos tienen menos que otros y eso es de admirar; pero esto no quiere decir que no podamos modificar o eliminar los que nos hacen daño.
Me imagino que de inmediato vienen a tu cabeza algunos de ellos. ¿No es cierto? Pero si quieres tener una idea más clara al respecto, te comparto algunos ejemplos según los expertos.
- Estar sentado por muchas horas. Por si no lo sabías, estar demasiado tiempo sentado, se relaciona anualmente con casi 160,000 casos de cáncer.
- Comer mucha carne o quesos. Obviamente este tipo de alimentos son necesarios para la salud, pero el exceso es lo que no recomiendan los expertos.
- Saltarse comidas. No debemos saltarnos los tiempos de comida, ni caer en el exceso de ingesta de alimentos.
- No dormir bien. No está demás recordarte que dormir bien es necesario para la salud.
- Automedicarse. Podría ser realmente peligroso para nuestra salud, es mejor consultar con algún doctor.
- No hacerse chequeos anuales. Más vale prevenir, que lamentar. Este tipo de chequeos son necesarios para descartar posibles patologías, o problemas de salud.
- Trabajar en exceso. El cansancio,la fatiga y es estrés nos enferman. Debemos trabajar para vivir, no vivir para trabajar.
- Consumir demasiada azúcar o alimentos procesados. No se trata de eliminarlos por completo de nuestra dieta, básicamente son los excesos.
- No tomar suficiente agua. Debemos mantenernos hidratados, la deshidratación claramente nos provoca problemas de salud.
- Y no hacer ejercicio. La vida sedentaria es una de las razones más comunes de los problemas de salud, así que aunque sea camina, baila y muévete.
- No cuidar tu vista. Muchas veces dejamos a un lado nuestro sentido de la vista, y es importante cuidar la iluminación, hacerte exámenes regularmente, evitar reflejos entre otros.
- Someterse a un estrés excesivo. Ya lo mencionamos anteriormente, el estrés nos lleva a padecer enfermedades físicas, mentales y emocionales.
- Preocuparse demasiado. No tenemos el control de todas las cosas, así que debemos dejar de preocuparnos. Hacer lo que tenemos a la mano para resolver lo que realmente podemos controlar, y dejar que fluya.
- Utilizar una alarma estridente para despertarte. Los expertos recomiendan no utilizar una alarma tan estridente porque podría alterarnos mucho.
- Dormir demasiado. Sí, dormir es necesario, pero dormir en exceso (más de ocho horas), te hará sentir más cansado y perderás incluso la concentración.
- Cepillarte demasiado los dientes. ¡Eso me pasó a mí! Por si lo sabías, lavarte demasiado los dientes daña el esmalte de tu dentadura y los vuelve más sensibles.
- Limpiar en exceso. Sí, es necesario limpiar…pero no en exceso. Esto, según los expertos podría generar alergias y otras enfermedades. Además, nuestro cuerpo necesita anticuerpos, los cuales se generan cuando las bacterias entran en él. Si un área esta excesivamente limpia, no hay bacterias y no pueden crearse anticuerpos que protejan nuestro sistema inmunológico.
- Morderte las uñas. Mucha gente se muerde las uñas y por supuesto no es nada bueno, al contrario…ya que puede dañar los dientes y la piel alrededor del lecho de la uña, lo que puede provocar una infección
- Pasar horas frente a tus dispositivos móviles. Ansiedad, depresión y fatiga puede causar el uso excesivo de los dispositivos móviles. No se trata de dejarlos de usar por completo, se trata de utilizarlos moderadamente.
- Dormir después de comer. Además de fomentar el sobrepeso, podrías llegar a padecer de acidez y gastritis. Si quieres hacer una siesta, espera media hora al menos después de comer.
- Fumar y beber en exceso. Está de más hacer énfasis en esto, ya todos conocemos los problemas que fumar y beber en exceso causan. Así que…todo con medida.
Fuente: https://bit.ly/2SfKggo