Un abuelito llegó desesperado a Urgencias para que le dieran atención a su perrito pero no se dio cuenta de que era un hospital para humanos. Sin embargo el personal actuó de la manera correcta.
Sin duda este post restaurará tu fe en la humanidad…
Todo ocurrió en la ciudad de Puebla, México, donde un viejecito de nombre desconocido actuó con gran corazón, sin importarle lo que podría pasar con tal de salvar a su fiel amigo.
El hombre llegó apresurado con una bolsa de tela entre sus brazos y dentro de ella se encontraba el peludito que agonizaba y estaba a punto de morir.
Al principio los doctores se negaron, pero ante la desesperación e insistencia de aquel hombre por salvar la vida de su perrito, el personal del hospital no dudó en actuar y comenzar a atender al animal.
El hombre les dijo a los médicos: “Tiene diarrea, está ‘desguanzado’, no quiere comer, apenas toma agua, se queja bajito y está muy ‘tristito’”.
Tras el análisis del personal de salud, encontraron que el can estaba deshidratado y tenía una infección, por lo que al atenderlo lo pusieron a salvo y pronto comenzó a recuperarse.
Y eso no es todo, pues los médicos extendieron su mano y le dijeron al señor que si el perrito volvía a tener síntomas de enfermedad, lo llevara de vuelta para una revisión.
El señor y el perrito regresaron a casa y hasta ahora no se ha vuelto a saber de ambos, por lo que creemos que todo está bien.
