El objetivo del anuncio es terminar con los estereotipos que usualmente se les atañen a los niños en torno a los juguetes que deben utilizar, por lo general autos, robots o armas. Para la marca, el aprendizaje de una paternidad responsable a través del juego en un mismo espacio con niñas fomenta un ambiente de respeto hacia la igualdad de condiciones y responsabilidades que hombres y mujeres deben tener en la familia.
“Propicia el desarrollo emocional, nuevas formas de interactuar y aprender lo que significa el respeto”, dice en un comunicado sobre el lanzamiento de la campaña. “El consejo que les daría a los padres es: dejen que sus hijos jueguen”.
La directora de marketing de Hasbro, Kellen Silverio, explicó por su parte que la marca busca con esta propuesta “demostrar que tanto las niñas como los niños pueden aprender mucho jugando con muñecas. Pueden crecer convertidos en seres humanos que se cuidan los unos a los otros”.