Tina Hines caminaba junto a su esposo Brian en Phoenix, cuando repentinamente Tina cayó desvanecida al suelo, sus ojos estaban en blanco y su piel lucía de color morado.
Brian se dio cuenta de que no respiraba, pero logró resucitarla con RCP por primera vez.
Más tarde, en el hospital, la propia Tina escribiría un escalofriante mensaje que la mujer, muerta durante 27 minutos y resucitada seis veces, recibió del más allá.
Tina sufrió un paro cardiaco repentino que detuvo su corazón en seis ocasiones en total, otras tres camino al hospital donde fue resucitada por los paramédicos y por su esposo, y dos veces más ya en el nosocomio. En total, estuvo muerta por 27 minutos.
Al volver a la vida en el hospital, Tina le hizo señales a una de sus hija para que le diera un papel y un lapicero, donde garabateó un mensaje que parece escrito por un niño o en otro idioma.
En el mensaje se lee: “It’s real” (es real). Cuando los presentes en su habitación le preguntaron qué era real, ella sólo pudo señalar al cielo con los ojos llenos de lágrimas.
Una vez recuperada, Tina relató que, durante el tiempo que estuvo muerta, vio unas puertas negras y a Jesucristo delante de ellas, rodeado por un resplandor amarillo brillante.
La experiencia marcó de manera importante a la propia Tina y a su familia, al punto que hace unos días una de sus sobrinas, Madie Johnson, se tatuó en la muñeca de la mano derecha el mensaje garabateado por su tía al resucitar y lo compartió en Instagram junto con la historia.