Patrick Saunders, de 87 años, pasó su vida rodeado de caballos y sólo tenía días para vivir, así que su último deseo era alimentar a un caballo.
El personal de cuidado del Hospicio de North Devon, Inglaterra, lograron llevar a un equino hasta la cama de Patrick.
“Los caballos han formado una gran parte de la vida de nuestra familia, así que este fue un momento muy especial”, mencionó la hija de Patrick a medios locales.
“Es un momento que nunca olvidaré”, declaró una de las enfermeras que estuvo acompañando al señor Saunders en sus últimos días.
Tristemente, Patrick murió en el hospicio apenas 3 días después del encuentro con el caballo.
Sus últimos días habían sido iluminados sin fin por la visita de Victor el caballo.