Al menos cuatro niños murieron el martes por un disparo de obús del régimen sirio en una ciudad asediada de la Guta Oriental, región rebelde al este de Damasco donde los niños ya sufren de desnutrición y enfermedades.
El régimen bombardeó el mismo día otras localidades de la región rebelde. Pero el disparo en la ciudad de Yisrin dio lugar a imágenes especialmente duras.
Un fotógrafo de la AFP que acudió al lugar vio los cuerpos de al menos cuatro niños, con sus carteras escolares y un pequeño zapato cubierto de sangre.
“Un obús disparado por las tropas del régimen golpeó la entrada de una escuela en la ciudad de Yisrin en el momento en que los niños salían del centro, matando a cuatro colegiales”, dijo a la AFP Rami Abdel Rahman, director de la oenegé Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH).
Precisó que también pereció un adulto en este ataque.
Una fuente médica en el hospital de Yisrin confirmó a la AFP este balance, e indicó que 25 personas resultaron heridas.
Imágenes desoladoras
Al llegar al hospital, un hombre que acababa de ser informado sobre la muerte de su hijo empezó a gritar. Los presentes apenas conseguían tranquilizarlo.
Otro hombre lloraba ante los cuerpos de dos niños envueltos en mortajas blancas, con los rostros marcados por heridas.
Otros niños, heridos en la cabeza o las piernas, permanecían sentados, perplejos y aturdidos, en camas del hospital. Entre ellos, un menor con las piernas seccionadas, mientras otro gemía de dolor cuando se le vendaba la pierna.
“Yo salía del colegio e iba a tomar una callejuela cuando (el obús) cayó. Hubo muertos, heridos”, cuenta a la AFP un niño.
La Guta Oriental es uno de los últimos feudos de la rebelión siria en lucha contra el régimen de Bashar Al Asad desde hace seis años.
El 22 de julio Rusia anunció una tregua con los grupos rebeldes llamados “moderados” en esta región, donde se ha creado una “zona de distensión”.
Pero desde hace una semana hay en este sector un recrudecimiento de los bombardeos del régimen.
Además de Yisrin, los bombardeos también golpearon la localidad de Mesraba, más al norte, matando a tres civiles, entre ellos un niño, según el OSDH.
En una morgue, un camarógrafo de la AFP vio a socorristas y a jóvenes colocar dos cadáveres en bolsas de plástico blancas, los de un padre y su hijo.
“Que Dios se vengue de los opresores”, murmuraba el hermano del hombre.
Fuente: AFP