Varias personas habían reportado una invasión de “serpientes marinas mutantes” en el extremo oriente ruso.
¿Cuál fue la razón?
Esos extraños cuerpos de varios metros de largo fueron arrojados por las olas hacia las costas del mar de Chukotka y causaron confusión entre los lugareños.
Estas misteriosas “cabezas y cuerpos” de tono marrón oscuro también fueron vistas por varias tripulaciones quienes hicieron un llamado para dar a conocer sobre ello. Para algunos lugareños, se trata de alguna especie desconocida de animal acuático, posiblemente un tipo de lombriz gigante o de serpiente marina. En la opinión de otros, el origen de estos objetos es antropogénico. Hubo quienes incluso consideraron la posibilidad de estar frente a organismos mutantes.
Y ¿Cuál es la verdad?
Lo que trajo el mar en realidad se trataba de algas pardas de la especie Nereocystis luetkeana.
Estas enormes algas, que apenas viven un año, comienzan a crecer en los meses de febrero y marzo, se reproducen en noviembre y en el mes siguiente se desprenden de lecho del mar. Luego, la parte superior del tallo junto con la ‘cabeza’ es llevada por la corriente oceánica.