Roberto Esquivel Cabrera, un mexicano de 54 años, que ganó la atención mundial, al presumir tener entre sus piernas un miembro de 48 centímetros, fue desenmascarado por un médico.
A pesar de sufrir continuos efectos adversos, como infecciones de orina, dificultad para desarrollar su día a día, y ni siquiera puede mantener relaciones sexuales, a él solo le preocupa ostentar el récord del pene más grande del mundo, pendiente de confirmación por parte del Guinness.
Doloroso truco
El doctor Jesús Pablo Gilmore, quien examinó su miembro a través de una tomografía computarizada, explicó que la mayoría de esos 48 centímetros están compuestos por prepucio (la piel del pene que cubre el glande), vasos sanguíneos y piel inflamada.
De hecho, el pene no parece alcanzar más de 18 centímetros, una cifra por encima de la media, pero muy por debajo de la exuberante longitud de la que se enorgullece.
Un psiquiatra afirmó que Cabrera le contó que cuando era más joven se colocó pesas colgando de su prepucio para que aumentará de tamaño.
Las agencias también descubrieron que el hombre fue deportado de los Estados Unidos en los años 90, por exhibirse delante de niñas menores de edad.
Con información de El Español