El estado de Texas (EE.UU.) ejecutó hoy a William Rayford, un hombre que fue condenado a muerte por asesinar en 1999 a su expareja cuando gozaba de libertad condicionada por haber matado trece años antes a su esposa.
A Rayford, afroamericano de 64 años, lo declararon muerto a las 20.48 hora local (02.48 del miércoles GMT) tras recibir una inyección letal en la prisión de Huntsville, según notificó el Departamento de Justicia Criminal de Texas.
Sus últimas palabras fueron: “Carol (una de sus víctimas) no merecía lo que le hice. Encuentren por favor un lugar en sus corazones para perdonarme”.
Rayford fue condenado en 1986 a 23 años de cárcel por matar a puñaladas a su esposa, Gail, que se había separado de él.
No obstante, le dejaron salir en libertad condicional en 1994 tras cumplir apenas ocho años entre rejas por el hacinamiento carcelario que había en Texas.
Transcurrido un tiempo en libertad, hacia 1996, Rayford inició una relación con Carol Lynn Thomas Hall, que tres años después se convertiría en su segunda víctima.
Hall dio por terminada la relación en 1999 y tuvo que pedir ayuda a un familiar para echar a Rayford de su casa, ubicada en el sur de Dallas.
Dos meses después, el 16 de noviembre de 1999, Rayford regresó a la vivienda de Hall e ingresó sin permiso con una copia de la llave que la mujer no sabía que tenía.
Rayford apuñaló por la espalda al hijo de Hall, Benjamin, de once años en aquel entonces, mientras que la mujer emprendió una huida a pie para pedir auxilio.
Según la autopsia y declaraciones de testimonios, Rayford la alcanzó en plena calle, la golpeó hasta dejarla inconsciente, entonces la cargó en sus hombros y se la llevó.
Abandonó el cuerpo, estrangulado y apuñalado, además de golpeado, en un túnel de alcantarilla cercano antes de que la Policía de Dallas, alertada tanto por el pequeño Benjamin como por los vecinos, llegara al lugar y lo encontrara deambulando por las inmediaciones.
Rayford fue el segundo reo ejecutado este año en el país, ambos en Texas.
Fuente: EFE