Una familia de San Sebastián, Retalhuleu, estaba aterrada por los extraños ruidos que provenían de entre las paredes.
Los vecinos pensaron que podía tratarse de algún animal, por lo que dieron aviso a los socorristas de la Cruz Roja.
Los socorristas acudieron a la vivienda ubicada y de inmediato comenzaron a perforar la pared para establecer de que se trataba.
Tras abrir un pequeño hoyo, pudieron observar que era una serpiente que estaba atrapada y que no podía salir, por lo que continuaron abriendo la pared para poder retirarla.
Luego de tres horas de arduo trabajo, los socorristas pudieron capturar una masacuata de tres metros de largo, la cual fue liberada posteriormente en su hábitat.
Con información de Noti Seis