El sostén está en fase de pruebas, y Ríos y el equipo de su compañía, ’Higia’, tienen en mente sacarlo a la venta a principios de 2019, a un costo estimado de USD$120.
“Mi madre tuvo cáncer de mama en dos ocasiones. En la segunda vez, la mamografía no detectó un tumor en fase 3 y le tuvieron que hacer una doble mastectomía. Me di cuenta que los métodos de detección eran muy falibles y me dediqué a buscar otra solución”, cuenta Julián Ríos.
‘EVA’, el sostén que inventó, está diseñado para usarse una hora a la semana y no es un reemplazo a los estudios clínicos, sino que es “una profesionalización de la autoexploración”.
De acuerdo a sus pruebas y con una base de datos de unas 1.500 personas, ‘EVA’ ha logrado detectar 89% de casos, a comparación del ultrasonido, con un 63%, dice.
‘EVA’ estará disponible en venta directa a las usuarias para que monitoreen sus resultados en sus teléfonos celulares. Además, ‘Higia’ ha firmado convenios con instituciones como el Instituto Mexicano del Seguro Social para que los usen en sus revisiones.
FUENTE: bbc.com