Una mujer que permitió el abuso físico y mental de sus dos hijas casó indignación al despedirse tirando besos a los miembros de su familia luego de que se le dictara una sentencia de 20 años en Estados unidos.
Según las pruebas, Morgan Summerlin, de 25 años, llevó a las menores, de cinco y seis años, a las casas de hombres donde fueron abusadas a cambio de dinero en efectivo.
Summerlin se declaró culpable del delito calificado por el juez como una “crueldad” irá a prisión por abuso a niños en primer grado, tráfico sexual de un menor y utilizar a un niño con fines indecentes.
La mujer pasará dos décadas tras las rejas, con otros 10 en libertad condicional.
Los niños ahora estarán bajo el cuidado de un miembro de la familia, luego de brindar su testimonio por las acciones de su progenitora.
Después de que Summerlin se declarara culpable, la fiscal principal asistente del distrito, Irina Khasin, comentó: “Es difícil imaginar hechos que sean más horribles que los encontrados en este caso”.
“Espero que estas dos niñas de alguna manera puedan sobrevivir a este abuso y convertirse en adultas saludables que puedan llevar una vida productiva y satisfactoria”, .