Un hombre que no pudo eructar por 34 años debido a una condición rara logró hacerlo después de recibir inyecciones de Botox en la garganta.
Neil Ribbens, de 34 años, perdió su capacidad de eructar cuando era bebé y, en consecuencia, quedó con dolor después de las comidas cuando la extraña condición le impidió liberar el gas de su estómago.
Pero desde que recibió la inyección experimental de Botox, Neil ha estado eructando “como una rana” y dijo que el procedimiento es “lo mejor que pudo haber sucedido”.
“Tengo más confianza, estoy más saludable y me siento mucho más feliz”, dijo al Manchester Evening News.
El tratamiento experimental ha puesto fin a décadas de incomodidad que muchos médicos no pudieron tratar.