La Federación inglesa de fútbol (FA, por sus siglas en inglés) ha dictaminado no sancionar a Pep Guardiola, entrenador del Manchester City por unos comentarios que realizó sobre el árbitro Anthony Taylor, antes del encuentro ante el Manchester United del pasado 11 de noviembre.
“Va a intentar hacer su trabajo lo mejor posible igual que los entrenadores y los futbolistas. El señor Taylor va a intentar hacer un buen partido. Lo importante es concentrarnos en nuestro juego conociendo a quién nos vamos a enfrentar, eso es todo”, dijo el entrenador español.
“Con suerte tomará buenas decisiones para ambos lados y será un buen partido. Toda Inglaterra y toda Europa nos estará mirando”, añadió en la previa del partido al ser cuestionado sobre la elección del colegiado.
Taylor fue criticado por algunos aficionados del City por haber nacido cerca del estadio de Old Trafford y suponer por ello que existe cierta simpatía del colegiado por los ‘Diablos Rojos’.
No obstante, Taylor es un declarado aficionado del Altrincham, club de la Séptima división inglesa.
En el pasado, otros técnicos de la Premier han recibido multas por criticar las acciones de los árbitros. Por ejemplo, José Mourinho, estratega del Manchester United, fue sancionado con 50.000 libras (56.000 euros) por hablar sobre Taylor el año pasado antes de un partido con el Liverpool.
El pasado 5 de octubre, Rafa Benítez, entrenador del Newcastle United, fue sancionado con 60.000 libras (68.000 euros) por unos comentarios que realizó sobre el árbitro Andre Marriner, antes del encuentro contra el Crystal Palace el 22 de septiembre.