La Universidad de Michigan realizó un estudio sobre infidelidad, cuyos resultados han arrojado que una mujer, cuando está enamorada, no es infiel, ni aunque se ponga una buena borrachera, a diferencia de los hombres.
En el caso de los hombres, dice el estudio, entra en juego el ego, ya que el estar con otras mujeres les hace tener cierto sentimiento de superioridad, al ser capaces de conquistar a otras chicas. En el caso de las mujeres, literalmente “no tienen ojos para nadie más”, cuando están enamoradas, y esa sensación la llevan al plano corporal, por lo que no requieren estar con otro persona además de su pareja.
A través de una encuesta, los investigadores manifestaron que quienes son infieles no soportan estar solos, ni sentirse vulnerables, así que buscan a otras personas y así sentir que no están solos, aunque su pareja se vaya en algún momento.
En el caso de las mujeres, afirman, ni siquiera estando ebrias son infieles, ya que solo piensan en su pareja, y no entra en juego el ego como en los hombres.
Para que no haya infidelidad, el estudio recomienda mantener, obviamente, una vida sexual activa, así como una comunicación estrecha y constante entre la pareja, para que el otro no sienta que se va quedando solo.