Luego de cancelar dos de los conciertos de su ‘Sweetener World Tour’ por motivos de salud, Ariana Grande confesó que todo se debió a una reacción alérgica que tuvo después de comer tomates.
En un post de Instagram, la estrella dijo que recientemente descubrió que tuvo la desafortunada reacción a ese tipo de verdura, que causó que incluso su garganta se cerrara y le impidiera cumplir con sus conciertos.
La artista describió el proceso por el que está pasando como si se estuviera “tragando un cactus”, pero para calmar a sus seguidores también mencionó que su recuperación está “progresando lentamente”.
Ariana le dio las gracias a sus fanáticos de Florida por comprender que no podrá llevar a cabo un par de los conciertos pactados para ese estado, aunque agregó que compensará a las ciudades de Tampa y Orlando tras las cancelaciones.
FUENTE: labotana.com