Es ampliamente aceptado que nuestra capacidad de producir ácido hialurónico comienza a disminuir alrededor de mediados de los 20 años, causando los primeros signos de envejecimiento visible.
El ácido hialurónico es un compuesto natural que se encuentra en la mayoría de los tejidos y la piel.
Mejora la elasticidad de la piel, es un humectante natural y mantiene la piel regordeta, por lo que cuando comienza a disminuir nuestra piel se vuelve más susceptible a desarrollar líneas finas y arrugas.