La albiceleste volvió a dejar muchas dudas ante el equipo africano, acuciadas ante la falta de su gran estrella
Las dudas siguen en la Argentina de Sampaoli. Después de vencer a Rusia con lo justo en el último encuentro preparatorio, donde salvó los muebles gracias a un gol de Agüero, la contundente derrota frente a Nigeria (4-2) ha vuelto a encender las alarmas, si bien es cierto que el combinado sudamericano no contaba con Leo Messi, que tenía permiso para regresar a Barcelona después del choque contra el próximo anfitrión de la Copa del Mundo.
El partido era una gran prueba para Dybala, que sin el crack culé debía demostrar que está preparado para comandar el ataque argentino, pero tras disputar 60 minutos, el genio de la Juventus ha vuelto a decepcionar. El primer tiempo, no obstante, sí dejó sensaciones relativamente positivas a nivel colectivo, y de hecho Argentina llegó a ponerse 2-0.
Con Agüero a buen nivel, Banega dominando el medio campo, y Pavón profundizando por derecha de forma constante, Argentina sí arrancó bien el duelo. El 1-0 fue de obra de Banega, que transformó una falta directa desde la frontal con mucha clase, mientras que Agüero puso el 2-0 después de que Dybala diese un gran pase en profundidad para Pavón, que asistió al delantero del Manchester City.
Nigeria, a partir de entonces, respondió de maravilla. Fue justo antes del descanso cuando recortó distancias, gracias a un excelente gol de falta de Iheanacho. Ya en el segundo tiempo el cuadro africano comenzó a salir con velocidad, y en un visto y no visto le dio la vuelta al marcador tras sendos contragolpes. Primero anotó Iwoni y después Idowu, para desesperación de Sampaoli. Argentina se fue arriba a por el empate, y de nuevo apareció Iwobi para poner el 4-2 definitivo.
