Consumidores atraídos este martes por la venta de 500 pares de “zapatillas-abono” de la empresa de transporte público berlinesa (BVG), para viajar todo el año por una parte de la red, formaron largas colas a pesar del frío.
Desde el sábado, decenas de personas hacían cola, algunas equipadas con material de camping, delante de las dos tiendas que venden estas zapatillas con los colores de algunos de los asientos del metro berlinés, es decir un diseño que mezcla el rojo, el negro y el azul. El billete está insertado en la lengüeta de las deportivas.
Vendidas por 180 euros, el precio incluye un abono anual al metro, al autobús y al tranvía berlineses pero no a los trenes de cercanías. Un billete al año cuesta mínimo 761 euros.
“Lo más interesante, es el billete dentro y que sólo hay 500 ejemplares. ¡Los guardaré para mi colección!”, afirmaba Andreas Leu a la AFP, envuelto en un enorme saco rojo de dormir para desafiar las bajas temperaturas. Presente desde el sábado, vino especialmente desde Leipzig (a 165 km de Berlín).
“Me permite ahorrar bastante dinero, teniendo en cuenta que no gano tanto”, indicó por su parte Julian Kienst a propósito de estas zapatillas deportivas fabricadas por el gigante alemán Adidas.
Algunos no dudaron en revenderlas en Ebay a precios que alcanzaban hasta los 1.150 euros.
Las “zapatillas-abono” son válidas hasta el 31 de diciembre de 2018.
La BVG, a menudo criticada por la calidad de su servicio, no duda en hacer campañas de publicidad destinadas a causar furor, y a veces bromeando también con autocrítica.
Incluso llegó a ironizar en Twitter sobre la venta de estas deportivas con una foto de la cola de los compradores acompañada de la frase: “Hacer esperar a la gente, es uno de nuestros superpoderes”.
AFP.