El entrenador Atlético reconoce que lo pasará mal en la grada y que, aunque mejor se calla sobre la expulsión, es consciente que en ese aspecto debe mejorar
Diego Pablo Simeone, entrenador del Atlético de Madrid, en la conferencia de prensa previa a la vuelta de la semifinal de la Europa League ante el Arsenal, ha pedido a sus aficionados que no descansen ni un sólo segundo animándoles: “Mañana necesitamos hacer un gran partido y que exista una gran comunión entre el equipo y la gente. Nos enfrentaremos a un rival peligroso y con buenos futbolistas. Seguramente será un partido bonito”, dijo el técnico argentino.
“Yo siempre me ilusionó con lo mejor cuando empiezan las temporadas. Obviamente, buscamos llegar lo más lejos posible en lo que nos toque jugar. Parece que queda poco pero queda mucho y no tenemos que salirnos de nuestra línea. Nuestra línea es pensar en el partido de mañana, sabiendo que ellos son un equipo muy directo de media cancha hacia arriba y que Ozil es su jugador más peligroso por su creatividad y visión de juego. Tenemos que jugar como se necesita jugar el partido de mañana”, prosiguió Simeone.
“En las copas, últimamente ningún resultado te da ningún tipo de tranquilidad. En las rondas finales es muy importante la capacidad de adaptación, manejar las emociones, jugar en equipo y ser respaldado por una estructura de conjunto. Ojalá mañana podamos mostrar eso sobre el campo, porque nos acercará a lo que queremos”, apuntó el entrenador rojiblanco, quien espera un gran ambiente este jueves en el Wanda Metropolitano: “Lo dije en el postpartido en Londres. Necesitamos un estadio que explote, que esté con ilusión y energía positiva. Que transmita pasión, porque eso somos nosotros”.